jueves, 5 de abril de 2007

Asamblea Constituyente con las horas contadas


Confusión y pocos objetivos claros son algunas de las características del trabajo de la Asamblea Constituyente. Propuestas muy diferentes unas de otras, falta de capacidad, o simplemente diferentes visiones de país, son los obstáculos con los que tropiezan los constituyentes para llevar a cabo su trabajo.

Apenas tres meses tiene la Asamblea Constituyente para completar su trabajo; el plazo fatal vence el 2 de julio. Si hasta esa fecha no logran consenso, más allá de ganadores y perdedores, la decisión de las diferencias la tomará la población. Pero la pregunta de fondo es… ¿Bolivia ganará?.

Parece inevitable que superen las diferencias; por tanto, se aplicará el sistema de aprobación de la nueva Constitución con la mayoría relativa de sus representantes, algo que no es saludable para Bolivia.

La aprobación de alrededor de 300 artículos se ve muy lejana. La enorme demora en aprobar el Reglamento de Debates -cerca de siete meses- se comió gran parte del plazo que termina en agosto, como manda la Ley Especial de Convocatoria para la Asamblea Constituyente.

Propuestas innecesarias tales como la modificación de símbolos patrios, incorporación de la hoja de coca al escudo nacional, o la idea de convocar a elecciones el 2008 son parte de los temas distractivos y poco constructivos por los que los constituyentes se ven enfrentados día a día.

La intención masista de adelantar elecciones el próximo año ha desencadenado un clima pre-electoral y, por si fuera poco, los constituyentes andan de gira, visitando sus regiones para recibir propuestas departamentales. Según algunos, clarificarán las demandas regionales; según otros, entorpecerán más el trabajo de la anhelada redacción de una nueva Constitución.

¡Pobre Bolivia!... Pero -al mal paso darle prisa- mis queridos constituyentes.

1 Comment:

Alejandro Soliz dijo...

Modifica la sintaxis de tu REMATE.. Buen análisis!!!
Elizabeth