Privación a la educación privada

Por: Alejandro Soliz

Conversando con el Dr. Augusto Villarroel, me quedó claro el panorama sobre el posible desconocimiento del nuevo Estado Boliviano a las Universidades Privadas en Bolivia, a partir de la nueva Constitución Política del Estado que redacta la Asamblea Constituyente.

El problema es más grande del que aparentemente nos muestran los medios de comunicación.

Un experto constitucionalista como es Villarroel -con la Constitución Política del Estado en la mano- explicó a Ga-Z On Line los pros y los contras de esa intención del partido de gobierno para atentar contra la educación privada.

En la actual CPE existen artículos que protegen los derechos de todo ciudadano boliviano a recibir educación; es el caso del artículo 7 inciso e) que dice: “Toda persona tiene los siguientes derechos fundamentales, a recibir instrucción y adquirir cultura”.

No es un secreto que todos los años son muchos los bachilleres que intentan ingresar a universidades estatales; empero, esos intentos son vanos porque no logran un espacio ya sea por el nivel de educación básica o secundaria -que es mediocre, por no decir malo- o por la falta de recursos económicos o infraestructura para sustentar la educación estatal. Miles de bachilleres quedan fuera de los cupos límite que cada universidad estatal tiene.

Quizás por evitar sobrepoblación de profesionales, por la carencia de fuentes de trabajo, o por otros motivos, la educación estatal discrimina a bolivianos originarios o no, pero bolivianos al fin que tan solo tienen deseos de superación; pero estos no pueden ser satisfechos por un estado carente de soluciones en un mar de problemas.

Otro artículo en el que se apoyan las Universidades Privadas para sostener la legalidad de su funcionamiento es el artículo 188, en el que se reglamenta de alguna manera el funcionamiento de las mismas, en dicho artículo se ponen claros los deberes del estado para con las universidades y viceversa.

Teniendo esas bases legales las Privadas se han dado a la tarea de recolectar 1.000.000 de firmas para garantizar la educación privada en Bolivia y la inclusión de artículos referentes a la misma en la nueva constitución que será redactada por la asamblea constituyente.

Al mejor estilo boliviano reconocido internacionalmente, nos seguimos peleando por temas de forma y no de fondo, por que la pelea debería ser por el grado de capacitación de los estudiantes sean estos de Privadas o Estatales y las fuentes de trabajo que existen en el país para los unos y los otros, no podemos darnos el lujo de seguir exportando bolivianos en busca de mejor educación y mejores días.

¡Dejémonos de macanas!